A MIS MAESTROS
Contexto
En Colombia, desde 1951 el entonces Presidente de la República emitió el Decreto 0996 por el cual “se ordena celebrar la Fiesta del Educador”, teniendo en cuenta que recientemente el Papa Pío XII había declarado a San Juan Bautista de La Salle como patrono de los educadores.
https://www.mineducacion.gov.co/1759/articles-102904_archivo_pdf.pdf
La fecha es motivo para expresar muchos sentimientos, reclamos, situaciones sectoriales, experiencias, y en mi caso, para rendir tributo.
Infancia
Mis primeros maestros fueron mis padres Alfonso y Carmenza. Precisamente ella, la siempre sonriente, fue educadora -asumo que de allí proviene mi vocación- y aunque por razones de salud nunca la vi trabajar, continuamente enseñaba con dulzura maternal, rigor ético y firmeza santandereana.
Posteriormente aparecieron los profes del Jardín Infantil Los Ángeles (Cartagena), Doña Aura y Don Atilio, con su grupo de educadores cuyo nombre no logro recordar, mas estoy seguro de que sus huellas de afecto y buen ejemplo quedaron grabadas en mi corazón.
Juventud
En el Colegio de La Esperanza, con Don Antonio Irizarri a la cabeza y su hijo Don Jorge como digno heredero, enclavado en las históricas callejuelas de La Heróica, aquellos baluartes de la educación reunieron a hombres y mujeres (“La Seño” Belén, “Mesie” Egel, Profesor Cabarcas, Puentes, Salinas, entre otros) que forjaron toda una generación de personas de bien.
En las aulas universitarias, alternando los salones del viejo claustro de San Agustín (Universidad de Cartagena) con la moderna infraestructura del Hospital Universitario, y eventualmente las ruinosas instalaciones del Hospital Santa Clara, aparecieron los maestros de la medicina.
Me honra llamarlos así, porque tuvimos la fortuna de contar con Profesores cuya labor era desarrollada con la pasión del educador por vocación, cuyo ejemplo signa en el estudiante una impronta indeleble, basada en rigor académico, principios y valores, y sobre todo, un elevado sentido humanista.
Postgraduado
Cuando realicé la especialización en Gerencia de Servicios de Salud, también conté con la fortuna de que la Corporación Universitaria del Meta en asocio con la Universidad Jorge Tadeo Lozano, dispusieran de un destacado equipo de profesores -para esa época todos provenientes de Bogotá- quienes contribuyeron generosamente a nuestra formación.
Y así, la vida cursa. Y con ella, permanentemente nos acompaña alguien que nos educa, nos enseña, nos conduce. Esa es la vida del maestro, labor que desde hace varios años disfruto, tal vez para devolverle simbólicamente a todos aquellos que lo hicieron conmigo.
Esta es la vida de quienes dedicamos horas y horas para prepararnos, para brindar a los estudiantes lo mejor de nosotros en el campo que hemos elegido para compartir lo único que crece cuando se da: el conocimiento.
Feliz Día Maestros, Feliz Día Colegas.
5 comentarios
Carmenza Salas · 15/05/2020 a las 4:18 PM
Excelente escrito me agrada saber que tu mami también fue maestra, es una profesión que es muy gratificante. Bendiciones.
Beatriz Verbel · 15/05/2020 a las 4:06 PM
Felicitaciones a todos los Educadores. René que gran huella dejas en cada persona que tiene el privilegio de estar en tu entorno… Eres un gran Maestro
Ruby Escobar · 15/05/2020 a las 12:27 PM
Respetado profesor,
Nos deja un profundo mensaje de gratitud 🙏 gracias, gracias por su valioso aporte a la humanidad.
Ruby Escobar , Senadora JCI
Martha Abello · 15/05/2020 a las 8:59 AM
Espectacular! La profesión que enseña a todas las profesiones.
Inelda agudelo · 15/05/2020 a las 8:35 AM
Maravilloso reconocimiento a los gestores de vocacion y pasión por los sueños de niños desde edad temprana. Lindo homenaje a la Señora Carmenza quien realmente hizo un gran trabajo al ser fuente de ejemplo y tenacidad para el Doctor Rene. Felicitaciones. Los maestros en su día